Los anfibios han sido encontrados en un lago a 2.100 metros de altitud

Científicos de la Universidad de Lérida (UdL) han descubierto una población de tritones única en el mundo en un ibón del Pirineo oscense, a 2.100 metros de altitud. Según informó la UdL en un comunicado, los investigadores del Departamento de Producción Animal han localizado un grupo del Calotritron asper, llamado popularmente tritón de los Pirineos, que ha evolucionado de forma diferente a otros individuos de su especie, que está incluida en la categoría de casi amenazada.

Se trata de animales que alcanzan la madurez sexual sin completar la metamorfosis morfológica, lo que se denomina neotenia. El profesor de la UdL Delfí Sanuy, explicó que, probablemente, es la única población neoténica del tritón pirenaico que existe en la actualidad, ya que la introducción de peces para la pesca deportiva los ha hecho desaparecer.


Nueva especie de tritón pirenaico
Ejemplar de la nueve especie encontrada.

El proyecto de investigación, que se ha llevado a cabo con el patrocinio del Programa de Biodiversidad de Endesa, ha contado con la colaboración del Instituto de Biología Evolutiva de Barcelona y el Museo de Ciencias Naturales de Granollers. Los científicos han analizado las características morfológicas, ecológicas y genéticas de esta población de tritones, que se estima en unos 400 ejemplares.

Así, han comprobado que su adaptación a unas condiciones de vida extremas los diferencia bastante de sus congéneres. Sanuy argumentó que "teniendo en cuenta que durante la última glaciación los macizos pirenaicos eran demasiado fríos para ser habitados por esta especie, este proceso único de neotenia adaptada a la vida lacustre se ha producido en menos de 8.000 años".

Siempre acuáticos

Los tritones neoténicos descubiertos por los expertos de Lérida en el Pirineo de Huesca son siempre acuáticos, presentan branquias en diversos grados de desarrollo, tienen la piel lisa y un aspecto más esbelto que otros Calotritron asper. Su maduración sexual es rápida, pero viven menos años que sus congéneres (una media de 10 años, por los 25 que alcanza habitualmente el tritón del Pirineo).

Lo más sorprendente, según el profesor Delfí Sanuy, es que "hay una reducción del flujo genético entre la población del ibón y la de los torrentes próximos". Eso demostraría que "la neotenia como medio para adaptarse a un hábitat muy diferente del original habría producido un cierto aislamiento respecto a otras poblaciones cercanas de tritones".

Los científicos quieren seguir prospectando toda la zona para continuar comparando esta población de tritones del Pirineo con otras próximas y para estudiar su proceso evolutivo. La pregunta que queda en el aire es cómo estos animales se han adaptado a unas condiciones de vida extremas, diferenciándose de otros individuos de su especie tanto morfológica como genéticamente.

Fuente: www.elperiodico.com